Visita Cuernavaca, conocida como la “Tierra de la Eterna Primavera”, y disfruta de su clima templado, ambiente vibrante y sitios espirituales fascinantes. Esta ciudad ha sido hogar de figuras históricas como Moctezuma II y el emperador Maximiliano, quienes construyeron aquí sus residencias. Cuernavaca ofrece una mezcla de historia, paisajes hermosos, spas, palacios imponentes y una vibrante cultura local.
Después del recorrido por Cuernavaca, continúa el viaje hacia Taxco, un pueblo pintoresco situado en las laderas del Cerro del Atache. Reconocido como monumento nacional, Taxco cautiva con sus calles empedradas, arquitectura barroca, arte local y su rica tradición minera. Al llegar, podrás recorrer la plaza del Zócalo, rodeada de cafeterías y tiendas, además de visitar museos y el imponente Templo de Santa Prisca, una de las joyas de la arquitectura barroca mexicana. Esta iglesia de color rosa destaca por su belleza y su elaborado diseño.
Taxco fue en su momento un importante asentamiento indígena, hasta que con la llegada de los españoles se convirtió en el primer gran centro minero del país. Hoy en día, todavía se extrae plata en la zona, y los visitantes pueden bajar en elevador a la mina prehispánica local para ver de cerca este mundo subterráneo iluminado por metales brillantes.
Este recorrido ofrece una combinación perfecta entre historia, cultura y paisajes únicos. Cuernavaca y Taxco son destinos turísticos destacados por su autenticidad y encanto. Explorar sus calles, templos y minas es una experiencia que te conectará con el pasado y la riqueza cultural de México.